Ayer vi la adaptación de "El Corredor del Laberinto", novela escrita por James Dashner. Tenía muchas ganas de verla después de haber leído este verano los dos primeros libros. Pero antes de empezar a desgranar la película y dar mi opinión sobre ella voy a a dar un aviso: si no has leído el libro y/o quieres llegar al cine sin ideas preconcebidas sobre la película te aconsejo que dejes de leer porque puede que se me escape algún pequeño spoiler. Tras esto, te dejo el tráiler de la película, para que vayamos entrando en materia...

Y si todavía no te ha quedado claro de qué va, he aquí mi sinopsis... La película comienza igual que el libro: Thomas (interpretado por Dylan O'Brien) abre los ojos y se da cuenta de que está en un ascensor elevándose hacia la superficie. Al llegar, se encuentra rodeado de más chicos jóvenes que le dan la bienvenida al Claro, que como su nombre indica es un claro en el bosque rodeado de unas grandes paredes de piedra. Más allá de los muros se encuentra el Laberinto, que cambia de forma cada noche. 

Los clarianos se dividen en grupos por profesiones: unos se dedican a cosechar, otros a limpiar, otros a cocinar... y los más fuertes y ágiles se dedican a recorrer el Laberinto. Estos se dedican a recorrer sus muros durante el día buscando una salida y deben volver al Claro antes de que anochezca, pues sus puertas se cierran y quedarían encerrados en su interior junto con los laceradores, unos monstruos mitad máquinas, mitad animales que son letales. De hecho, nadie ha conseguido sobrevivir una noche en el Laberinto.

Thomas no se acuerda de nada, tan solo de su nombre, al igual que el resto de sus compañeros "clarianos". Lo único que saben es que hace tres años alguien les metió allí, que cada mes llega un nuevo "verducho" y que llevan desde entonces buscando una salida. Pero cuando llega Thomas, todo cambia.  Llegará una nueva persona en el ascensor: se trata de Teresa, una chica que parece conocerle pero de la que él no recuerda nada, y para colmo las puertas del Laberinto no se cierran por la noche. Todo parece indicar que la culpa de todo la tiene Thomas. Todos los clarianos intentarán encontrar una salida del Laberinto mientras luchan contra los laceradores para poder mantenerse con vida.  

 

Una de las cosas que más me ha gustado de la película son las sensaciones que transmite. Al igual que en la novela de Dashner, sentimos lo mismo que el protagonista: confusión al principio, caos, rabia y miedo. Cada vez que la cámara enfocaba al Laberinto un escalofrío recorría mi cuerpo. Por no hablar de la angustia y casi claustrofobia en algunas escenas (como la que sale en el tráiler cuando Thomas intenta entrar en el Laberinto mientras se están cerrando las puertas).

El ritmo de la película, aunque pueda parecer que decae en ocasiones, hace que cuando estás más relajado consigas sobresaltarte, al igual que les ocurre a los protagonistas de la película. Hay una tensión constante que hará que te sientes en el borde del asiento y no quieras apartar los ojos de la pantalla ni un segundo.

Otra de las cosas que más me han gustado ha sido sin duda el Laberinto: el tamaño, la forma, las puertas, las paredes (la hiedra, importante) y el movimiento de las mismas. En la escena del sector 7 casi se me sale el corazón por la boca.

Otro punto a favor son los actores. A pesar de ser jóvenes ya han participado en series y películas que seguramente conocerás: a Dylan O'Brien, que encarna a Thomas, puedes verle en la serie de MTV "Teen Wolf"; Kaya Scodelario (Teresa) te sonará de la serie británica "Skins"; Will Poulter, que es el encargado de dar vida a Gally, líder de los clarianos, ha actuado en películas como "Somos los Miller" y Thomas Brodie-Sangster (Newt) sale en la superproducción de la HBO "Juego de Tronos". Todos ellos han sabido darle vida a sus respectivos personajes y añadirles más detalles que no han hecho más que aumentar la fuerza de cada uno dentro de la trama (menos Teresa, quien de cuatro frases que dice en la película tres son "Thomas".) Incluso los gestos y las miradas entre ellos aportan credibilidad a la trama.

Y tú, lector, que estarás leyendo ahora estas líneas dirás "¿Otra distopía más? Menudo rollo". Te puedo asegurar que aunque parezca así al principio, conforme va avanzando la película irás cambiando tu opinión. Para todos aquellos que estéis hartos de escenas de amor he de deciros que en esta primera parte de la trilogía distópica no las váis a encontrar. "El Corredor del Laberinto" no trata de hacer una revolución contra el poder establecido, sino de decidir entre quedarse "cómodo" viviendo donde estás o arriesgarte y encontrar una salida.

En mi opinión es una película espectacular, con muchos efectos especiales y una buena adaptación a pesar de los cambios. Obviamente no pueden calcar todas las escenas del libro, pero lo más importante lo han conservado (menos la telepatía, hola ¿dónde estás?). Creo que las modificaciones que han hecho han sido para mejor, aportando mayor agilidez y tensión a la trama.

Sin duda el final te dejará con la boca abierta y con ganas de soltar una sarta de improperios (como en el libro) ya que se queda totalmente abierto para una segunda parte, la cual ya está en fase de preproducción tras la compra de los derechos por parte de Fox.

Si quieres más información o ver fotos de la película puedes visitar la página web oficial o si prefieres adentrarte en el Laberinto e intentar descubrir cómo han llegado hasta allí los personajes te recomiendo que pinches en este enlace.

Y tú, ¿ya te has adentrado en el Laberinto?